La Policía Nacional de Alcorcón detuvo a tres individuos acusados de seis robos con fuerza en comercios de nuestra ciudad y Móstoles, utilizando el método de robo del ‘alcantarillazo’.
Los arrestados fueron sorprendidos con las manos en la masa cuando acababan de asaltar y robar en una tienda de componentes informáticos de Móstoles, también por el método del ‘alcantarillazo’, según informa la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
Los hechos se produjeron en la madrugada del día 16, cuando los agentes, que realizaban labores de prevención de la delincuencia, detectaron como un vehículo ocupado por tres individuos accedía a gran velocidad al municipio de Alcorcón, procedente de Móstoles.
Agentes en labores de prevención
Por ello, decidieron darle el alto, procediendo a la identificación de sus ocupantes, pudiendo observar que dos de los individuos presentaban heridas recientes en sus manos y brazos.
Tras diligencias policiales conjuntas entre agentes de las comisarías de Policía de Alcorcón y Móstoles, establecieron que dichas personas coincidían plenamente con las características físicas de unos individuos que momentos antes habían accedido al interior de un establecimiento en Móstoles.
Allí, habían fracturado la luna del escaparate, introduciéndose en el local y consiguiendo sustraer varios equipos informáticos.
En el registro del vehículo, se intervinieron numerosas herramientas, guantes y ropa usada en la comisión de los hechos delictivos.
A disposición del juez
La rápida actuación policial concluyó con la detención de los tres varones, como presuntos responsables de un delito de robo con fuerza, pasando posteriormente a disposición judicial.
Avanzadas las pesquisas, los investigadores determinaron que los sospechosos formaban parte de un grupo criminal dedicado al robo con fuerza en establecimientos, especializados en el método del ‘alcantarillazo’, acreditando su participación en, al menos, cinco hechos delictivos.
Alcantarillazo que rompe los escaparates
El método denominado ‘alcantarillazo’ consiste en fracturar las lunas de los escaparates con las tapas de las alcantarillas públicas para poder acceder al interior de los establecimientos.
Esto les facilita un rápido acceso al interior de los locales y tras apoderarse de los efectos, les facilita igualmente una rápida huida por el lugar de entrada.
Además, en el caso de ser detectados en las inmediaciones no portarían instrumental que les relacionara con el robo.